Lamborghini Huracán Evo: la evolución de la especie
La firma italiana ha presentado el Lamborghini Huracán EVO siguiendo la misma filosofía del Huracán Performante, aunque con ciertos cambios a nivel aerodinámico que le hacen estar un escalón por encima frente a sus hermanos de gama incluyendo un nuevo splitter delantero. Realmente, el enfoque principal del EVO es mejorar el plano dinámico del vehículo, y no solo añadir más potencia de manera indiscriminada.
Como decimos, toda la aerodinámica del nuevo modelo ha recibido una profunda revisión. El frontal luce un nuevo diseño, con un splitter doble integrado que mejora la admisión de aire y canaliza el flujo a alta velocidad, alejándolo de las ruedas delanteras para evitar turbulencias. La parte baja del vehículo también ha sido modificada, al igual que la zaga.
La parte trasera del EVO sí ofrece un conjunto visualmente nuevo. Lamborghini ha reubicado las colas de escape hacia arriba, en lo que parece un guiño a los modelos GT3 de la casa. Algo parecido sucede en el interior, que transmite cierta familiaridad, aunque resulta imposible ignorar la nueva pantalla HMI táctil, con un tamaño de 8,4 pulgadas.
En cuanto al interior, la cabina de Lamborghini Huracán EVO destila deportividad y elegancia por partes iguales; dos mundos unidos a través del patrón hexagonal, que hace referencia a la configuración molecular del carbono. Monta un nuevo acabado mixto entre la alcantara y el cuero para el nuevo color Arancio Xanto del exterior.
En cuanto al motor, ¿Qué mejoras encontramos?
El motor V10 atmosférico de 5.2 litros ahora produce un sonido mucho más evaucador, gracias en parte al nuevo sistema de escape. Ahora el bloque produce 640 CV a 8.000 rpm y 600 Nm de par a las 6.500 rpm.
Gracias a estas cifras -y a su construcción ligera, que para la báscula en 1.422 kg- el Lamborghini Huracán EVO puede alcanzar los 100 km/h en solo 2,9 segundos, y los 200 km/h en solo 9 segundos. Además, la velocidad máxima del nuevo “toro” de la firma es superior a los 325 km/h.
Además, ofrece diferentes modos de conducción -Strada, Sport y Corsa- que modifican el funcionamiento del motor, la caja, el sistema de tracción, de la dirección, el sonido y la dureza de la suspensión. Para frenar tiene discos carbocerámicos y calza neumáticos Pirelli PZero de medidas 245/30 R20 en el eje delantero y 305/30 R20 en el trasero.
Sistema LDVI
El corazón del nuevo Huracán es el Lamborghini Dinamica Veicolo Integrata (LDVI): una unidad de control que procesa cada aspecto dinámico del coche, que controla todos los sistemas que tienen que ver con su comportamiento para anticipar el siguiente movimiento y necesidades del conductor.
Este sistema de control dinámico de la conducción está recibiendo, constantemente, datos de los diferentes sensores repartidos por el vehículo para, posteriormente, ajustar todos los sistemas de ayuda a la conducción. Pero más que reaccionar, el LDVI está pronosticando qué puede suceder. Dicho de otro modo, es un sistema que anticipa su trabajo para saber dar la respuesta adecuada en cada momento. La centralita que alberga la CPU del sistema se comunica con los diferentes giroscopios y sensores, que analizan, en tiempo real, el centro de gravedad del automóvil, el ángulo de giro de las ruedas, la transferencia de carga en el balanceo de la carrocería, la inclinación y el giro de la misma. Toda esta información se utiliza para anticiparse a los próximos movimientos del conductor.