Qué es y cómo funciona el Head-up display en los coches
Los sistemas de proyección elevada de información o Head-Up Display se basan en mostrar parámetros como la velocidad, las indicaciones de ruta del GPS o los límites de velocidad de la vía sobre el parabrisas, es decir, directamente sobre el campo de visión del conductor de forma que éste no necesita apartar la vista de la carretera durante la conducción ni un segundo.
Evidentemente esto supone una mejora sustancia en la seguridad ya que no es necesario mirar hacia el cuadro de mandos para conocer datos de importancia, algo que resulta igual de beneficioso tanto si conducimos en invierno en condiciones de baja visibilidad como en cualquier otra época del año. Además, se reduce la fatiga visual porque la adaptación que tiene que realizar el cristalino para enfocar la información es mucho menor.
Hay diversos tipos de sistemas de proyección de información, pero por norma general, el funcionamiento de esta tecnología se basa en el principio de reflexión de la luz, que gracias a la incorporación de una serie de espejos, rebota hasta situarse en una posición equivalente a la que tendría un objeto colocado en el exterior del vehículo y a unos dos metros por delante del capó.
En el sector del automóvil, habitualmente nos encontramos con dos clases de Head-Up Display: los que proyectan la información directamente sobre la luna delantera y Head Medium Display, los que lo hacen sobre un soporte específico colocado entre el cuadro de mandos y el parabrisas. En el primer caso, la variante más sofisticada del sistema, es necesario un tipo especial de parabrisas para visualizar correctamente las imágenes y un proyector muy potente.
Actualmente, ofrecen muchísimos datos, como la velocidad máxima de la vía, las indicaciones del navegador, la marcha recomendada para consumir menos carburante o incluso, incluso los hay que advierten de la presencia de peatones en la calzada en situaciones de baja visibilidad.
Realidad Virtual
La realidad virtual ha evolucionado mucho durante los últimos años y se ha ido haciendo un hueco en las hojas de ruta de muchos fabricantes de automóviles como una forma sencilla para mostrar información al conductor. Con una adaptación de la fuente de información, se podrían proyectar imágenes y símbolos en realidad virtual (o realidad mixta) para hacer más gráficas y comprensibles las indicaciones del GPS o para mostrar de forma más llamativa advertencias o avisos importantes para el conductor.
De momento toda esta tecnología sigue en plena fase de desarrollo, aunque sus creadores ya se atreven de hablar de 2020 como posible fecha de la primera integración del sistema en un modelo de producción.